top of page
Foto del escritorBrigitte Rivas

ESG*: NUEVOS PARÁMETROS EMPRESARIALES

(*Environmental, Social and Governance)



Guía para la aplicación de la debida diligencia sobre DDHH en las empresas.

Responder a las preocupaciones de los consumidores cada vez más comprometidos con temas como el cambio climático, genera efectos en la planificación de inversiones, el acceso al tránsito global de mercancías y disminuye riesgos en torno a la aceptación de las empresas.


El foco de las empresas está puesto en la comunicación de estos valores y en la erradicación de prácticas conocidas como el “eco blanqueo(greenwashing) que entendían al cliente como un receptor de información no responsable, sin tomar en cuenta el crecimiento de las agencias y agentes individuales que ponen en la mira la prolijidad de información genérica y reclaman cada vez mayor veracidad y compromiso real.


Los Retos del Greenwashing el Woke Capitalism


El mayor reto que enfrentan la mayoría de las empresas tiene que ver con la transformación de las aspiraciones en acciones reales. La estandarización de normas vuelve a ser un obstáculo en un universo de reglas “recomendatorias o blandas”, en donde la evidencia ha quedado de lado.


La ausencia de comunicación entre los agentes de consumo y las empresas constituye el mayor reto para la transformación de los agentes económicos del futuro. El eco blanqueo es un problema de comunicación, pero cada vez más se convierte en un riesgo económico y de captación de inversiones.


De acuerdo con una publicación de la revista Harvard Deusto, los dos elementos claves para hacer más asertiva esta nueva gestión de objetivos son:


1. La correcta producción, aplicación y comunicación de las normas y de los instrumentos de rendición de cuentas. Es fundamental informar detalladamente a los grupos de interés (o a los inversores, en el caso de inversiones en ESG), apoyándose en normas de información que ayuden a mostrar la evidencia.  

En el caso de la inversión en ESG, cada vez es más importante ir más allá de los rankings y establecer unos criterios de inversión propios, en los que se definan tanto los objetivos de las empresas en las que se invierte como el cumplimiento de los mismos.  

Estos objetivos deben entender todo el trazo de la cadena de valor de la empresa y cubrir todos los posibles riesgos de daño, generando estrategias individuales y que conecten con los espacios de responsabilidad de cada empresa.


2. El segundo elemento para evitar las alegaciones de ‘greenwashing’ es la gestión del discurso aspiracional. El discurso aspiracional es necesario en la comunicación de las empresas: se deben comunicar las aspiraciones, los objetivos de futuro, lo que la organización quiere llegar a ser. El futuro debe ser ilusionante, y nos debe llevar a esforzarnos para ser mejores. 

Los mensajes deben ser colectivos y generar dinámicas narrativas comunes. La relación de apego se construye con el tiempo, debe considerarse una inversión y debe ponerse en mano de profesionales. No deben descuidarse los espacios de conflicto con los grupos interesados, porque es allí en donde la relación cobra verdadero interés y compromiso.


3. Y es que en conflicto se puede llegar a acercar discursos y posiciones, siempre que haya voluntad de inclusión del otro (lo importante es dejar de ver al otro como enemigo y tratarlo como adversario al que hay que incluir en la relación). Para lograrlo, hay que dedicar recursos especializados en la gestión de stakeholders. No basta con participar en las conversaciones en los medios sociales o pertenecer a foros de debate, la relación es clave en la reducción de las alegaciones de greenwashing.

Una estrategia de toma de decisiones en materia de DD.HH. que comprenda el rol empresarial y que no pretenda equipararlas ni al rol de los gobiernos ni al de los individuos, es un tema que no deben demorar en abordar las empresas. Un código que entienda sus particularidades como sujetos económicos y que propicie una mejor comprensión de sus acciones.


Es necesario generar conciencia sobre este punto con el fin de lograr los objetivos más importantes de la agenda internacional: empresas responsables con el entorno ecológico y social, pero que no puedan ser desviadas del rol económico que cumplen estos agentes cuya acción es vital para la sociedad.

8 visualizaciones0 comentarios

Comments


bottom of page